Que no quede en el olvido
La polémica sobre las universidades privadas, las peligrosas declaraciones de la vicepresidenta Montero -no olvidemos que es vicepresidenta- eliminando de un plumazo la presunción de inocencia… cualquier cosa sirve para tratar de cubrir y dejar en el olvido los casos de corrupción de Pedro Sánchez y sus familias.
Todos ellos -incluso los que desde el Gobierno se ha tildado de denuncias de recortes de prensa o se ha dicho que no iban a llevar a nada- siguen adelante.
Esta semana, prosigue el caso Hermano en Badajoz, y ahí están los letrados que representan a HO formando parte de las acusaciones populares; también se ha sabido hoy de las nuevas citaciones a empresarios amigos de Moncloa por el caso Begoña.
La labor como hormigas de las acusaciones populares, por más que le pese a Pedro Sánchez y sus adláteres, continúa en marcha y no van a conseguir silenciarla pese a sus maniobras.
Y como todas las triquiñuelas para socavar el sistema judicial requieren algo de tiempo, por eso lanzan sus bombas de humo. La última la semana pasada con la ‘resignificación’ del Valle de los Caídos.
Una campaña de firmas que ya han firmado más de 54.000 personas y en la que se pide a los obispos españoles que no caigan en la trampa del Gobierno de Pedro Sánchez, muy dado a cambiar de opinión.
Aunque lo importante es que no se pierda el foco y que no queden en el olvido todas y cada una de las causas en las que está involucrada ‘la famiglia’ socialista y ‘la famiglia’ de Pedro Sánchez: caso Hermano, caso Begoña, caso Software, caso Koldo, caso Ábalos … en definitiva caso PSOE y caso Pedro Sánchez.