Ábalos ¿Tirará de la manta?
De poco le ha valido a Ábalos la intentona de retrasar su declaración. Cuando se anunció que sería investigado por el Tribunal Supremo, toda España empezó a mirar con gran interés un juicio que, posiblemente, decidirá la política española los próximos años (quién sabe si las próximas décadas).
La euforia aumentó cuando supimos que aceptaba declarar voluntariamente, sin necesidad del suplicatorio del Congreso, el 12 de diciembre. Pero la euforia pasó a estupor cuando el exministro socialista amagó con posponer su comparecencia por “motivos informáticos” y porque “el caso era tan extenso, que no se podía hacer un estudio detallado con tan pocos días de preparación”. Todo esto probablemente excusas o medias verdades, frente a la realidad de que, en un sentido jurídico (quien sabe si mediático) le interesaba declarar después de Aldama.
Pero el juez instructor fue tajante: no sólo no lo iba a retrasar, sino que estudiaría pedir el correspondiente suplicatorio ante el Congreso para poder interrogarlo, porque aunque al aforado le corresponde la decisión de comparecer o no ante el Tribunal, ello no significa que pueda hacerlo cuando le apetezca. Como dice nuestro querido abogado Roldán: naranjas de la China.
El cerco se estrecha sobre Ábalos.
Al final Ábalos acató, y la comparecencia del 12 de diciembre sigue en pie. ¿Puede ser que tenga miedo de las posibles medidas cautelares a las que podría recurrir el juez después del suplicatorio y su imputación? ¿Teme el exministro acabar en prisión preventiva?
Sea lo que sea, Ábalos tiene miedo. Miedo de que Aldama o Koldo se vayan de la lengua. Miedo de la acusación popular, que está realizando una enorme labor investigando y poniendo contra las cuerdas la endeble defensa del exministro. Pero, sobre todo, Ábalos tiene miedo de haberse quedado sólo en esto.
Desde su destitución del gobierno, al socialista le van quedando menos apoyos. Guarda tanto fango en sus bolsillos, que empieza a ser pesado y hediondo para sus “compañeros de partido”, empezando por aquel jovencísimo Pedro Sanchez al que aupó hasta la conquista de Ferraz.
La alegría de 2017 hoy se torna en tragedia.
Hoy los tiempos han cambiado, José Luis. Hoy, si el PSOE lo necesita para salvar unos años más de legislatura, te venderán con el suplicatorio. Van a hacer que te comas el fango, el tuyo y el de ellos.
Ya puestos a ser sacrificado por los que un día fueron tus “amigos”, ¿Por qué no tomar la valiente decisión de tirar de la manta? Si ya has visto lo que te valoran “los tuyos”, ¿Por qué no “morir matando”? ¿Puede ser esa la razón de esta declaración voluntaria y todos sus posteriores amagos? ¿Puede estar queriendo Ábalos posicionarse bien en el relato para lanzar todo el fango hacia quienes le han traicionado? ¿Va a tirar de la manta y mostrar a toda España el fango que nos esconde Ferraz?
Mañana es su declaración ante el Tribunal Supremo. En Hazte Oír estaremos muy atentos a cualquier mínimo detalle, y lo usaremos para barrer el fango de este país que amamos y que merece más que una casta de corruptos.
En un país donde nunca pasa nada, nosotros elegimos creer que pasarán cosas. Haremos todo lo posible, desde folletos hasta autobuses, pasando por los juzgados, para que esas cosas pasen.
¡Hasta mañana, José Luis!
Naturalmente, estaremos presentes el 12 de diciembre. ;)